Por Lucas Torres

14/11/2018

¿Cuáles son los desafíos del mercado latinoamericano para adoptar la cuarta revolución industrial?

Cuarta revolución industrial

A pesar del abordaje futurístico que el tema recibe en algunas conversaciones, la cuarta revolución industrial es una preocupación actual de las empresas latinoamericanas. En el Futurecom 2018 (realizada en Brasil) hubo análisis sobre la viabilidad de proyectos y el desarrollo de soluciones para este sector.

Pero, ¿qué falta para que la Industria 4.0 tenga éxito en América Latina?

“Un tema recurrente entre quienes quieren desarrollar productos para este segmento es la conectividad interna:  desde el cableado interno en este ambiente hasta la falta de disponibilidad de servidores en la nube”, menciona Sandro Kirchner, Gerente de Productos de IoT de Khomp.

De acuerdo con este ejecutivo, cuando las empresas cuentan con una solución de almacenamiento y procesamiento de datos, esta es interna (es decir, un servidor local). “Es lo que exige la interferencia humana para la recopilación y lectura de informaciones o una estructura local, donde las informaciones se desplazan por cables y/o radiofrecuencia” agrega.

En este contexto, la logística de los espacios fabriles representa un problema, pues dificulta la organización y distribución de estas vías de transmisión. “Además, hay que considerar la necesidad de transferir y calcular datos en tiempo real, lo que resulta casi imposible dentro de este panorama”, explica.

Kirchner también comenta que , lamentablemente, la inseguridad aún genera resistencia a la nube. “Los ejecutivos de ese sector no tienen la cultura de almacenar y manejar informaciones para ambientes tercerizados y le temen al riesgo de que sus máquinas caigan en manos criminales”, menciona.

 

Falta de estándares

Otra limitación para la viabilidad de Industria 4.0 en los países de América Latina es una necesidad compartida con el resto del mundo: la falta de estandarización en el lenguaje entre los equipos de IoT. Esto dificulta la viabilidad de los proyectos de integración, debido a la necesidad de considerar individualmente los protocolos de comunicación de cada solución dispuesta en el espacio fabril.

“Piense en las máquinas de corte a láser utilizadas en la industria metalúrgica. Incluso si se aplican a la misma función, cada fabricante utiliza estándares diferentes de comunicación. Entonces, para descubrir cuál sería ideal para usted, hay que pasar por toda una larga curva de aprendizaje. De un equipo a otro”, comenta.

 

¿Y en su caso? ¿Cuáles son sus desafíos para adoptar esta revolución?

Si es integrador, desarrollador o representa a una empresa del sector industrial interesada en adoptar este nuevo modelo tecnológico, comparta sus dificultades en los comentarios.

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